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Caldo casero de carne: Sabor inigualable en cada cucharada.

Descubrí esta receta de caldo casero de carne de manera accidental, mientras investigaba sobre platos tradicionales de diferentes culturas. Me quedé fascinado por la historia y el contexto de esta receta, que ha pasado de generación en generación como un tesoro culinario.

El caldo casero de carne es reconfortante y delicioso. Su aroma llenará tu cocina y te hará salivar de antemano. Este plato es relativamente fácil de preparar, pero requiere algo de tiempo y paciencia. La combinación de la carcasa de pollo, los huesos de ternera, el morcillo de ternera y las verduras asadas crea un sabor sublime que te transportará a otro nivel de satisfacción.

Este caldo casero de carne es versátil y puede ser utilizado en diversas recetas, como sopas, guisos o como base para otras preparaciones culinarias. Además, es saludable y económico, ya que aprovecha ingredientes que normalmente se desechan. Puedes hacer una gran cantidad y congelar el exceso para utilizar en futuras ocasiones.

Ahora, te invito a seguir leyendo la receta y a ver este video de YouTube, donde podrás ver el paso a paso de cómo hacer este delicioso caldo casero de carne:

Índice de la Receta

    Video de cómo hacer caldo casero de carne

    Después de ver el video, te aseguro que sentirás aún más ganas de probar este caldo casero de carne. Así que, sin perder más tiempo, ¡sigamos con la receta!

    Ingredientes

    • 1 carcasa de pollo
    • 600 gramos de huesos de ternera
    • 250 gramos de morcillo de ternera troceado
    • 1 zanahoria lavada y troceada
    • 1 rama de apio lavada y troceada (solo la rama)
    • 1 puerro troceado
    • 2 ajos pelados
    • 1 cebolla
    • 1 tomate
    • 150 ml de vino tinto
    • Hojas de puerro, cebolla y tomate reservadas
    • 1 hoja de laurel
    • 2 ramitas de Romero fresco
    • 2 litros de agua

    Preparación: Caldo casero de carne

    1. Precalentar el horno a 220 grados. Colocar en una bandeja de horno la carcasa de pollo, los huesos de ternera y el morcillo de ternera troceado.
    2. Agregar la zanahoria, la rama de apio, el puerro y los ajos pelados a la bandeja. No añadir ningún otro ingrediente.
    3. Hornear durante aproximadamente 40 minutos.
    4. Mientras tanto, pelar y partir por la mitad la cebolla y el tomate. Dorarlos en una sartén sin añadir grasa hasta que estén tostados.
    5. Una vez horneados los ingredientes, transferir la carne y las verduras asadas a una olla grande.
    6. En la misma bandeja utilizada para el horneado, agregar 150 ml de vino tinto y raspar los restos y jugos para desglasarlos. Incorporar luego esta mezcla a la olla.
    7. Añadir las hojas reservadas del puerro, la cebolla y el tomate, la hoja de laurel y las ramitas de Romero fresco a la olla.
    8. Verter 2 litros de agua y los jugos del horneado con el vino.
    9. Poner la olla a fuego fuerte hasta que rompa a hervir. Desespumar y tapar.
    10. Dejar cocinar a fuego lento durante una hora y media.
    11. Después de este tiempo, colar el caldo a través de un colador para quitar las impurezas. Luego, colar nuevamente con un trapo para asegurar que no pase ninguna impureza.

    Información adicional de la receta

    • Tiempo de preparación: 40 minutos
    • Tiempo de cocción: 1 hora y 30 minutos
    • Porciones: para varias porciones
    • Nivel de dificultad: Fácil
    • Estilo culinario: Tradicional
    • Ocasión recomendada: Cualquier ocasión

    Utensilios de cocina utilizados

    • Bandeja de horno
    • Sartén
    • Olla grande
    • Colador
    • Trapo de cocina

    Información nutricional aproximada por ración

    • Calorías: 100
    • Grasas: 5 gramos
    • Proteínas: 15 gramos
    • Hidratos de carbono: 2 gramos

    Consejos y variaciones para la receta

    Para darle un sabor más intenso al caldo, puedes añadir huesos de ternera asados en lugar de cocinarlos en el horno. También puedes agregar otras verduras como pimientos, champiñones o calabacín para enriquecer el caldo.

    Sugerencias de bebidas y acompañamientos

    Este caldo de carne casero se puede disfrutar solo como aperitivo o como base para sopas, guisos y otras recetas. Para acompañar, se recomienda servir con pan crujiente y una ensalada fresca.

    En conclusión, este caldo casero de carne es una opción deliciosa y nutritiva para añadir sabor a tus platos. Es fácil de preparar y puede utilizarse en una variedad de recetas. ¡Prueba esta receta y comparte tu experiencia!